En reunión mantenida el día de ayer en Madrid entre la LFP, Dirección General de la Policía, Coordinadores de Seguridad del CNP, Directores de Seguridad de los clubs y Aficiones Unidas (a través de representantes de las distintas Federaciones de Peñas), se han evaluado las distintas medidas propuestas por la LFP para tratar de erradicar la violencia de los campos de fútbol.
El objetivo de Javier Tebas, presidente de la LFP es “eliminar a los ultras” utilizando todas las medidas al alcance de la LFP y con la colaboración de los clubs, los cuales se exponen a graves sanciones (incluso descensos de categoría) si son permisivos con la violencia.
Los clubs deberán colaborar de manera activa con la Unidad de Inteligencia de la LFP (de nueva creación) y CNP (policía) para velar por el cumplimiento de estas medidas y del cumplimiento de la Ley 19/2007 “contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte”.
Así mismo, los clubs deben aplicar su régimen disciplinario y cumplimentar y actualizar el libro de registro de seguidores, donde solo recogerán las peñas legalmente constituidas e inscritas en su correspondiente Federación de Peñas de cada club. Los grupos de aficionados que no reúnan estos requisitos no podrán recibir el trato de peña, ni acceder a entradas en desplazamientos, ni recibir reconocimiento por parte del club ni exhibir ningún tipo de pancarta relacionado con el nombre con el que ellos mismos se autodenominen.
Algunas de las medidas a adoptar son:
- Creación de la figura de Director de Seguridad de la LFP, así como de una “Unidad de Inteligencia” dentro de la LFP.
- Creación de una comisión de control y seguimiento entre Directores de Seguridad de clubs, Federaciones de Peñas, Fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y Director de Seguridad de la LFP.
- Potenciar la figura del Director de Seguridad de los clubs, que deberá tener dedicación exclusiva y se creara un departamento de seguridad en cada club. Estos, entre otras obligaciones, tendrán que viajar de manera obligada con su club y será el interlocutor válido en materia de seguridad.
- Habrá un “Director de partido” y “oficiales de seguridad” (ambos de la LFP) para vigilar la existencia de conductas que promuevan o inciten a la violencia, el racismo, la xenofobia o la intolerancia en el deporte.
- Sanciones por violencia verbal.
- Instalación de tornos con huella dactilar y reconocimiento facial en sectores de estadio donde existan factores de riesgo.
- Cierres de gradas o zonas de estadios donde se localicen focos de intolerancia.
- Retirada de puntos y descensos para los clubes. Se va a elaborar una normativa sancionadora para los clubs en esta línea.
- Reglamento de venta de entradas y desplazamientos de aficiones visitantes. Total control de a quien se le vende una entrada y como y cuando se desplaza.
- Elaboración de listado de grupos violentos.
- Elaboración entre Aficiones Unidas y LFP de un “Manual de bienvenida y buenas prácticas del aficionado”.
- Elaboración de un Código ético con la Asociación Española de Prensa deportiva para concienciar a la sociedad contra la violencia en el futbol.
